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viernes, 28 de septiembre de 2012

Tea & Toast

Tom nació en el año 1942, con ojos azules. El doctor dijo que su nacimiento se había adelantado. Su corazón se detuvo dos veces pero sin embargo sobrevivió . Al tomar su primera respiración  su mama dio su ultima. Su papa sabia que el no tenia la culpa, pero nunca mas lo pudo ver como lo miraba cuando había recién nacido. Rara vez su padre hablaba sobre ella, pero un día lo hizo. Y lo que dijo fue, tu madre siempre me decía "Querido, cuando el cielo haya oscurecido y tu corazón haya perdido toda esperanza, recorda que después del amanecer habrá sol, todo aclarara, y el cielo estará limpio. Te vas a levantar con la persona que mas amas y desayunaran te con tostadas".
Se conocieron a través de un amigo, y lo primero que dijo Tom fue "¿te gustaría bailar?" Bailaron toda la noche y cuando la música se hacia mas lenta el le pidió que no suelte su mano. El le pregunto muy educadamente "¿Te puedo acompañar hasta tu casa? En el camino el le contó sobre su nacimiento y como sufría por eso. Pero recordó lo que su mama solía decir acerca del te con tostadas.
Dos años pasaron volando, eran el uno para el otro. Y sin ningún plan concibieron a  un niño. El le dijo que la amaba pero solo iba a tener lo suficiente como para comida y ropa. Pero el siempre iba a amar a ella y a su bebe hasta el día que muera. Ella dijo que se iban a ocupar bien de esa pequeña nueva vida que de seguro iba a tener ojos azules.  También le dijo que iban a estar bien porque recordaba algo que le habían contado. Ella lamento nunca haberla conocido, pero estaba segura de que la madre de Tom habría dicho "Querido, cuando el cielo haya oscurecido y tu corazón haya perdido toda esperanza, recorda que después del amanecer habrá sol, todo aclarara, y el cielo estará limpio. Te vas a levantar con la persona que mas amas y desayunaran te con tostadas".
Tom tomo esas palabras e hizo que se sientan orgullosas de el. Trabajo día tras día y a toda hora sin parar. Se pudieron comprar una pequeña casa en las afueras de la ciudad. La niña creció bien cuidada y ellos se decían cuanto se querían día a día.
Cuarenta años mas tarde iban caminando por la calle pero de repente ella soltó su mano. El acariciaba su cara mientras la gente se empezaba a juntar alrededor.
Su respiración era el único sonido que el escuchaba. El estaba sentado en la cama junto a ella mientras lagrimas caían por su rostro y decía "Dios no la dejes ir ahora" . Su hija entro de repente con sus hijos en brazos y junto a su marido. Y ella le dijo "Papa, no se si mama nos puede oír ahora pero hay una cosa que ella quiere que sepas, cuando el cielo haya oscurecido y tu corazón haya perdido toda esperanza, recorda que después del amanecer habrá sol, todo aclarara, y el cielo estará limpio. Pero ahora es tiempo de que me dejes ir, y por la mañana quiero que te levantes y desayunes te con tostadas".

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